Los melasmas son manchas de tonos más oscuros que el de nuestra piel que salen mayormente por la exposición al sol sin protección, pero también por ciertas medicaciones, cambios hormonales (durante el embarazo, o por la administración de pastillas anticonceptivas) o predisposición genética. Estos parchecitos oscuros son resultados de superproducciones de melanina, y suelen salir en la frente, las mejillas y/o sobre los labios.
Si las manchas en la piel son recientes, consigamos alguna crema blanqueadora de piel. Los ingredientes que suelen contener son ácido salicílico y levadura. Si ya han pasado más de seis meses desde que se presentaron las manchas, necesitamos productos que tengan como ingredientes algunos retinoides o hidroquinona. Vamos a tener que acudir al dermatólogo porque ya necesitaremos una prescripción. Finalmente, los casos más intensos de melasmas pueden requerir tratamientos en consultorio: los peelings con ácido hipo-hidróxico y el láser son los más efectivos.
Igualmente, antes de desesperarnos y empezar a buscar soluciones, demos tiempo a que las manchas desaparezcan solas. Especialmente si son producto de la exposición al sol, puede que las más leves se aclaren solas. Si pasan unos meses y siguen ahí, podemos actuar.
0 comentarios:
Publicar un comentario